Al igual que con un par de zapatos nuevos, tu cuerpo necesita un tiempo para adaptarse a un nuevo
colchón. Te recomendamos que le des un tiempo a esta adaptación para que puedas llegar a disfrutar de los
beneficios y cualidades del colchón Emma.
La adaptación completa al colchón puede tardar de 3 a 8 semanas.
Nuestro periodo de prueba de 100 noches garantiza un tiempo más que
suficiente para probar el colchón y asegurarte de que Emma es para ti.
Relájate y disfruta de tu nuevo colchón.
Al desenrollar el colchón puedes notar un ligero olor a “nuevo”. Esto es perfectamente normal.
Airea el colchón durante unas horas en una habitación bien ventilada.
También puedes lavar la funda para acelerar este proceso. Con esto
eliminarás los olores que puedan haber quedado atrapados en las fibras.
Además, si lo prefieres, puedes diluir unas gotas de tu aceite esencial
favorito en agua y pulverizarlo directamente sobre la espuma.
(¡No sobre la funda!)
Puedes rotar el colchón de vez en cuando para garantizar un soporte óptimo y conservar su colchón en
buen estado durante más tiempo.
Una vez al mes durante los primeros seis meses.
Después, una vez cada tres meses sería suficiente.
Asegúrate de que la parte blanca de la funda y la capa azul del colchón estén
siempre hacia arriba. Esto ayudará a que su colchón mantenga todas sus cualidades.
Para rotar el colchón, basta con sujetar un extremo y girarlo manteniéndolo
plano sobre el somier o base, evitando acumular tensión en la espalda.
También puedes pedirle ayuda a una segunda persona.
(Nota: utiliza las asas para ajustar el colchón sobre la base, no para levantarlo)
Nuestro colchón Emma se adapta a todo tipo de bases, ya sea un somier de láminas, un canapé o bases
tapizadas. Si usas un somier, los espacios entre las láminas es recomendable que no superen los 5 cm.
Además, la funda del colchón Emma es antideslizante, por lo que se mantendrá siempre en su lugar.
Asegúrate de que la parte blanca de la funda y la capa azul del colchón estén siempre hacia arriba. Esto
ayudará a que su colchón mantenga todas sus cualidades. No recomendamos poner el colchón
directamente en el suelo para evitar el riesgo de aparición de humedades.
En la fabricación de nuestros colchones utilizamos espumas de célula abierta. Estas son altamente
transpirables, lo que te ayudará a dormir de forma más fresca y cómoda durante toda la noche.
Los somieres de lamas evitan que se acumule el calor y permiten una
correcta circulación del aire bajo el colchón.
Recomendamos el uso de ropa de cama de buena calidad y fibras naturales,
como el algodón. Materiales como la franela o el satén pueden retener el
calor e impedir el efecto refrescante.
Cuida de tu colchón para disfrutar de él por más tiempo.
Ambas partes de la funda pueden lavarse en la lavadora hasta 40°C. Esto
garantiza una correcta higiene y un ambiente de sueño limpio. No secar en
secadora, ni blanquear ni usar lejía.
Para disfrutar de un descanso aún más limpio y saludable, recomendamos utilizar nuestra protector de
colchón hipoalérgenico.
Cubre perfectamente el colchón, protegiéndolo además de ácaros de polvo
que pueden ser causa de alergias.
Nuestro protector de colchón Emma es impermeable, absorbe la humedad y
es transpirable, proporcionando un sueño sin alérgenos ni irritaciones.
Nosotros tenemos respuestas. Consulta nuestra página de preguntas frecuentes o contacta con nuestro equipo.